El Fresno Europeo se distingue por su albura clara, que va del blanco al blanco rosado, y un duramen ocasionalmente más oscuro con falso corazón. Presenta una fibra recta, grano medio y a menudo pequeños nudos tipo «ojo de perdiz», que le aportan un aspecto singular y muy apreciado en decoración. Su madera ofrece un equilibrio ideal entre resistencia y facilidad de trabajo.

Aplicaciones habituales del Fresno Europeo

Es muy valorado en carpintería y ebanistería fina. Se utiliza en muebles rústicos y de interior, carpintería de huecos y revestimientos (puertas, tarimas, frisos, molduras), chapas decorativas y artículos deportivos. Su versatilidad lo convierte en una opción excelente tanto para proyectos funcionales como para acabados de alto valor estético.

¿Por qué elegir Fresno Europeo?

Combina belleza natural, con su tono claro y textura uniforme, con unas propiedades mecánicas equilibradas: buena resistencia a la flexión, compresión y facilidad de curvado. Además, su mecanización es sencilla en la mayoría de procesos, desde el aserrado y secado hasta el cepillado, encolado o acabado, lo que lo hace ideal para artesanos, carpinteros y fabricantes que buscan calidad y fiabilidad en sus proyectos.